Me hace mucha gracia cuando las parejas me dicen que no han podido casi ni dormir ante la idea de tener que estar delante de la cámara para su sesión preboda y yo siempre intento tranquilizarlos antes, porque al final todos dicen que no era para tanto y que se lo pasaron muy bien.
A la preboda solo hay ir venir con ganas de divertirse un rato, de conocernos un poquito más y de tratar de ser lo más naturales posibles, no hay que fingir ni forzar nada porque ahí está el «truco», en dejarse llevar.
Mª Ángeles y Fran venían nerviosos pero enseguida cambiaron nervios por risas, cariño y ganas de tener un lindo recuerdo de esa bonita tarde. Ha sido estupendo trabajar con ellos porque son realmente encantadores y estoy ya deseando formar parte de su gran día.

Preboda-1000

Preboda-1001
Preboda-1002
Preboda-1003
Preboda-1004
Preboda-1005
Preboda-1006
Preboda-1007
Preboda-1008
Preboda-1009
Preboda-1010
Preboda-1011
Preboda-1012
Preboda-1013
Preboda-1014
Preboda-1015
Preboda-1016
Preboda-1017
Preboda-1018
Preboda-1019
Preboda-1020
Preboda-1021
Preboda-1022
Preboda-1023
Preboda-1024
Preboda-1025
Preboda-1026
Preboda-1027
Preboda-1028

Preboda-1029
Preboda-1030
Preboda-1031
Preboda-1032

Preboda-1033
Preboda-1034
Preboda-1035

Preboda-1037
Preboda-1038
Preboda-1039
Preboda-1040
Preboda-1041
Preboda-1042

Preboda-1043