Hay ocasiones en que la vida se vuelve caprichosa y en uno de sus giros vuelve a unir a personas que no se veían desde que eran niños. Esto fue lo que les ocurrió a Jose Enrique y Mónica, ellos eran compañeros de colegio, estaban en la misma clase, compartían y eran amigos, tanto, que cuando fueron a hacer su primera comunión su profesora los puso juntos porque le pareció que hacían buena pareja (buen ojo). Y así uno al lado del otro fueron hasta el altar. De ese día les queda esta foto que el padre de Mónica les hizo. Esa foto «premonitoria» que el 11 de mayo, 24 años después, se volverá a repetir. 
Fantástico Toñi! Genial reportaje. Me alegro muchísimo de que las cosas vayan saliendo, con unos resultados fracamente espectaculares.
Muchas gracias Pedro!. Me anima un montón tu comentario y me alegra mucho que te guste!
Saludos!! 🙂